Por: Rodrigo Vasquez
Una de las causantes de la obesidad es la nula actividad física que una persona tiene durante el día, debido a que el ritmo de vida actual ha simplificado muchas de las tareas que en antaño se realizaban mediante el ejercicio, por ejemplo, el simple hecho de caminar. Hoy tenemos automóviles, y ya ni siquiera el uso de la bicicleta es una alternativa.
“El sedentarismo disminuye la capacidad de adaptación a la actividad física. Una persona que está sentada frente al computador durante varias horas al día sufrirá comúnmente dolencias por ejecutar ejercicio físico ya que su cuerpo no está acostumbrado a hacerlo, y al contrario, si se trabaja sentado, también será víctima de dolores producto de estar sentado todo día, por malas posturas y por no matizar el trabajo con el ejercicio. Es una suerte de círculo vicioso”, según el profesor de Educación Física de la Universidad Autónoma del Sur, Marco Andrés Miranda.
No sólo el dolor de espalda o la obesidad son las únicas consecuencias de llevar una vida sedentaria, también los cuadros de estrés son comunes entre quienes no realizan actividad física ya que está comprobado que la actividad física y el deporte son buenas vías de escape como forma de recreación. Otros efectos del sedentarismo son el debilitamiento óseo, el cansancio crónico, y los efectos de la obesidad, como el colesterol alto.
Las disfunciones orgánicas como estreñimientos, várices, propensión a la inflamación de los órganos abdominales (provocada por distensión de los músculos debilitados de la pared abdominal), sensación de fatiga son consecuencia, en muchos casos, del sedentarismo.
“La recomendación es hacer alguna actividad física diaria, auque sea 20 minutos, pero constantemente, por ejemplo, caminar. Aunque lo más entretenido es hacer deporte”, explicó Marco Andrés.
“El sedentarismo disminuye la capacidad de adaptación a la actividad física. Una persona que está sentada frente al computador durante varias horas al día sufrirá comúnmente dolencias por ejecutar ejercicio físico ya que su cuerpo no está acostumbrado a hacerlo, y al contrario, si se trabaja sentado, también será víctima de dolores producto de estar sentado todo día, por malas posturas y por no matizar el trabajo con el ejercicio. Es una suerte de círculo vicioso”, según el profesor de Educación Física de la Universidad Autónoma del Sur, Marco Andrés Miranda.
No sólo el dolor de espalda o la obesidad son las únicas consecuencias de llevar una vida sedentaria, también los cuadros de estrés son comunes entre quienes no realizan actividad física ya que está comprobado que la actividad física y el deporte son buenas vías de escape como forma de recreación. Otros efectos del sedentarismo son el debilitamiento óseo, el cansancio crónico, y los efectos de la obesidad, como el colesterol alto.
Las disfunciones orgánicas como estreñimientos, várices, propensión a la inflamación de los órganos abdominales (provocada por distensión de los músculos debilitados de la pared abdominal), sensación de fatiga son consecuencia, en muchos casos, del sedentarismo.
“La recomendación es hacer alguna actividad física diaria, auque sea 20 minutos, pero constantemente, por ejemplo, caminar. Aunque lo más entretenido es hacer deporte”, explicó Marco Andrés.
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